Constipación

Constipacion

Constipacion

La constipación se produce cuando las heces se desplazan de una manera demasiado lenta a lo largo del intestino grueso. Las materias fecales que se quedan en el intestino demasiado tiempo, antes de su evacuación, se vuelven duras y secas. Su expulsión es difícil. En la mayoría de los casos, la constipación no representa un peligro, no constituye una afección pero sí podría ser un síntoma.

Muchas personas se consideran estreñidas porque creen que no es normal evacuar menos de una vez al día. De hecho, dos veces a la semana no es problemático. En cambio, los niños de pecho pueden evacuar materias fecales hasta cinco veces al día.

Causas

Cuando los alimentos dejan el estómago ya han sido reducidos a una papilla que sólo, parcialmente, ha sido digerida. En el curso de su paso al colon (intestino grueso), los líquidos que contiene son recuperados por el cuerpo. Este proceso lo transforma en materias fecales normales. Se vuelven más secas y duras a medida que su estancia en el colon se prolonga.

Evidentemente, aumentan más si tardas en ir al aseo. La evacuación de heces voluminosas y duras puede ser dolorosa y difícil y, por esto, las personas afectadas vacilan en ir al baño estableciendo, de esta  manera, un círculo vicioso. El modo en el que este constipación crónica se establece puede empezar desde niño. A menudo, empieza cuando comienzan a frecuentar la escuela. Muchos de los jniños tardan demasiado tiempo en evacuar una necesidad porque evitan utilizar los aseos de la escuela.

Constipación crónica

Una constipación crónica puede durar meses o años. Está habitualmente causada por una dieta mal equilibrada, por otra afección, o por la costumbre de retrasar la necesidad de ir al aseo. Una dieta con contenido débil en fibras y una aportación insuficiente en agua, son las principales causas de la constipación.
Personas con salud ocasionalmente pueden ser estreñidas. Un período de constipación podría también ponerse en marcha por otras afecciones como:
· Oclusión intestinal, particularmente un tumor o un crecimiento benigno.
· Insuficiencia renal crónica.
· Hipotiroidismo.
· Síndrome del colon irritable.
· Trastornos neurológicos como la enfermedad de Parkinson, la esclerosis en placas o una lesión en la médula espina.
· Cáncer de recto o colon.

Un constipación grave comienza repentinamente y dura algunos días. Puede ser provocada por obstrucción, inactividad prolongada, medicinas, deshidratación… Durante el embarazo, las mujeres pueden sufrir de constipación cuando el útero ejerce una presión sobre el intestino. Algunas veces, una anestesia general puede disminuir los movimientos del intestino durante los días que siguen a la intervención quirúrgica. Entre otras causas ocasionales, encontramos envenenamiento por plomo y la ingestión de alimentos poco digestibles.

Las siguientes medicinas pueden disminuir el paso de las materias fecales en el intestino y provocar un constipación grave:

· Anticonvulsivos indicados en el tratamiento de la epilepsia.
· Antidepresivos.
· Diuréticos.
· Medicinas cardíacas como los inhibidores cálcicos.
· Suplementos de hierro.
· Medicinas antidolor como codeina y morfina.
· Medicinas contra la tos y el resfriado.
· Antiácidos.

Los laxantes ayudan a los intestinos a expulsar las materias fecales provocando una constipación crónica. El funcionamiento de los intestinos se vuelve dependiente de la acción de los laxantes.
Las personas encamadas están más sujetas a la formación de un bloqueo agudo grave llamado fécalome. Las heces deben, entonces, ser evacuadas por el médico.

Síntomas y complicaciones

Constipacion síntomas

Constipacion síntomas

Los síntomas de la constipación son:
· Sensación de que los intestinos no han sido vaciados completamente.
· Sensación de hinchazón del vientre acompañado, a veces, por un ruido que parece un «gruñido».
· Gases.
· Indigestión.
· Disminución de la frecuencia de evacuación de las heces.
· Heces duras y secas, difíciles de expulsar.
· Pérdida del apetito.
· Dolor o una presión en el vientre.
· Hemorragia provocada por el esfuerzo.
La constipación puede arrastrar complicaciones. Las heces gruesas y duras pueden estirar el ano y provocar que se rasgue la piel. Estas grietas anales pueden ser muy dolorosos. A veces, heces muy difíciles de expulsar pueden provocar un prolapso rectal cuando una pequeña parte de la pared intestinal sale fuera del ano y debe ser metida, de nuevo.

Una constipación crónica aumenta el riesgo de divertículos. Se producen cuando se forman por una presión crónica aumentada dentro de la pared intestinal o cuando se asienta una oclusión y una infección. Esfuerzos intensos y prolongados de defecación, debidos a una constipación crónica, podrían causar hemorroides.

Diagnóstico

Consulta a tu médico si la constipación te supone un problema. Un examen físico revelará la presencia de heces duras en tu intestino o de masas anormales en tu estómago. Se comprobará, también, tu tono muscular por medio de un examen rectal.
Tu médico podría prescribirte una colposcopia. Son exámenes efectuados por medio de un tubo provisto de una fuente de luz rematada por una cámara que reenvía imágenes de la totalidad o de una parte del intestino grueso. Un lavado con barité permite ver las anomalías del intestino grueso sobre una pantalla radioscópica. Estas intervenciones exigen una preparación porque el intestino debe estar vacío para ser visto en la radiografía.

Tratamiento de la constipación y prevención

La constipación puede tratarse medicamente, pero modificaciones en el modo de vida, son necesarias.

Las prácticas siguientes están recomendadas para curar y prevenir la constipación:
· Evita las medicinas que tienen efectos astringentes.
· Haz ejercicio físico para estimular el paso de los residuos a lo largo de los intestinos.
· Bebe, por lo menos, ocho vasos de líquidos cada día. Lo mejor, el agua.
· Adopta una dieta con contenido fuerte en fibras alimentarias y con contenido débil en alimentos tratados.
· Aumenta tu aportación diaria en fibras para que tu alimentación contenga, aproximadamente, 25 g. si eres mujer y 38 g. si eres hombre. Una buena fuente serían los granos enteros, sobre todo las semillas de lino, frutas y verduras (que aumentan el volumen de las heces y facilitan su excreción).
· Evacua la necesidad a la misma hora (después del desayuno, por ejemplo), con el fin de acostumbrar a tu organismo.
· Consume zumo de ciruelas, compota de ciruelas pasas o higos que ablandan las materias fecales (progresivamente aumenta la cantidad con el fin de tener pocos gases).

Las medicinas son habitualmente utilizadas cuando las modificaciones efectuadas en la dieta y la higiene de vida, se revelan ineficaces. La inmensa mayoría de los laxantes deben emplearse con comedimiento y sólo en caso de necesidad:
· Los laxantes que aumentan el volumen de las heces estimulan la defecación.
· Los laxantes recubren las materias fecales de un lubricante.
· Algunos laxantes tienen un efecto irritante o estimulante sobre las paredes del intestino estimulando las contracciones que ayudan al desplazamiento de las heces hacia la salida.
· Los laxantes actúan reteniendo el agua en el colon para facilitar el paso de las materias fecales a lo largo de las vías intestinales.

Los lavados y los emolientes fecales pueden utilizarse para aumentar la cantidad de agua que ablande las heces. Estos productos son útiles si no debes, o no puedes, hacer esfuerzos intensos y prolongados de defecación. Sería el caso si tuvieras grietas anales o un prolapso rectal.
Estas medicinas pueden provocar dependencia. Empléalas conforme a las indicaciones de tu profesional de la salud.

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4 Comments

  1. Anita mayo 5, 2018
  2. Sonia mayo 7, 2018
  3. Stephen junio 5, 2018
  4. Robertha junio 14, 2018

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