Tipos de llanto de bebé mes por mes
El bebé tiene necesidades diferentes a los 15 días, al mes, a los 6 meses… Las lágrimas no tienen el mismo significado según la edad del bebé. ¿Cómo descifrarlas? A continuación, nuestros consejos.
Para el bebé, el llanto es su primer idioma y tiene un papel fundamental en el entorno del hogar. En general, llorando traduce, hasta los tres meses, tres grandes tipos de necesidades: hambre, sueño y dificultades digestivas. Las lágrimas entre los tres y nueve meses son menos frecuentes, aunque pueden intensificarse en el octavo mes con la llegada de sus ansiedades.
Recién nacido hasta 1 mes, 2 meses y 3 meses
Los gritos y llantos del bebé están marcados por el hambre y otros dos estímulos internos: la búsqueda de un sueño tranquilo y las dificultades digestivas.
- El llanto por hambre es fácilmente reconocible: aumenta muy rápido y se convierte en gritos de rabia que sólo el pecho o el biberón pueden calmar.
- El llanto por sueño está mezclado con sonidos de gruñidos, acompañados de inquietud y movimientos de la cabeza.
- Por último, el dolor asociado con molestias en el estómago o cólicos, provoca lágrimas espasmódicas y menos enojadas que cuando el bebé tiene hambre. Se calman y retoman al ritmo de las contracciones digestivas.
Bebé de 4 meses, 5 meses, 6 meses, 7 meses, 8 meses y 9 meses
Llanto de bebe
Entre los tres y nueve meses de edad, los niños son bastante tranquilos: encontraron su lugar en la familia. Si se sienten enfermos tienden a gemir.
Por contra, entre los 8 y 9 meses comienza la ansiedad. Tu pequeño volverá a tener a episodios frecuentes de llanto si te sitúas fuera de su campo de visión, o una cara que no conoce se acerca a su cuna.
Ten en cuenta, sin embargo, que el llanto de un bebé no se traduce automáticamente en una necesidad o angustia. También puede ser la expresión de una descarga «nerviosa» después de un día «desafiante» y rico en emociones.
Bebé de 8 meses, 1 año o 2 años y su angustia. ¿Cómo calmarle cuando llora?
¿Cómo calmar la ansiedad del llanto cuando el bebé crece? El niño a veces llora cuando su madre sale a otro lugar. Sin embargo, mientras alguien se queda cuidándole, es absolutamente necesario que te despidas de él y le digas que vas a regresar en un par de horas.
Puedes salir sin preocuparte porque dejará de llorar rápidamente. De hecho, con estas lágrimas el niño pone a prueba la determinación de sus padres, explica Stéphane Barbas, psiquiatra infantil.
En esta etapa el período de «separación temprana» es constructivo El niño empieza a entender que no lo es todo en la vida de sus padres.
Llanto de un bebé de noche: la comprensión
A la hora de dormir, muchas madres se enfrentan con el mismo temor: ¿cómo calmar el llanto del bebé?
¿Por qué esas lágrimas?
Desde las cuatro o cinco semanas, todos los bebés lloran un poco antes de anochecer. Esto sucede después de la cuarta o quinta comida. La duración de estas lágrimas va desde unas pocas decenas de minutos, hasta un par de horas. Son gritos airados que nada tranquiliza excepto los brazos de sus padres.
Los ataques de llanto sin razón aparente, en realidad son normales y necesarios: sirven como una salida para las emociones del día. El bebé «descarga» sus emociones de esta manera porque no tiene palabras para expresar la intensidad de los descubrimientos que han marcado su día. Su sistema de excitación está literalmente «lleno».
¿La solución? Muéstrate tranquilo y habla con el bebé en voz baja. Otra alternativa: prodígale tiernas caricias.
La compresión, junto con palabras tranquilizadoras, resulta eficaz.
¿Qué pasa si el bebé llora cuando le pones en la cuna?
Su llanto está probablemente relacionado con la angustia de la separación. Esta separación es esencial y algo que debe aprender.
Rituales entre el bebé y tú son necesarios para que se calme. Antes de acostarle, cuéntale un cuento.
Del mismo modo, para que el niño oiga la voz de sus padres deja abierta la puerta de su habitación, se sentirá reconfortado. Es importante que tu bebé disponga de su cuna y su espacio privado.
El bebé llora en su sueño, ¿qué hacer?
En ausencia de trastornos somáticos, no dramatices la situación tomando al bebé en tus brazos con riesgo a despertarle. Los bebés tienen un sueño frágil. Muy a menudo, el simple hecho de notar tu presencia será suficiente para tranquilizarle.
Si el bebé sigue llorando durante su sueño entre los 18 meses y los 2 años, es muy posible que tenga pesadillas. A esta edad, su percepción del mundo y su proceso madurativo atraviesan una etapa sensible.
Realmente, se enfrenta a los problemas a través de sus sueños. Pero, si el insomnio (con o sin llanto) se instala, no dudes en hablar con un médico ya que la calidad del sueño del niño es un parámetro crucial para un adecuado desarrollo.
Cómo calmar un bebé que llora
¿El bebé llora en la noche, a veces durante horas, y te sientes abrumado? Vamos a ver tres preguntas hechas por madres que quieren ayudar a calmar a su bebé.
El bebé llora durante horas, ¿es esto normal?
Tu pequeño llora sin cesar y no sabes qué hacer. Los pediatras han abordado la cuestión muchas veces. Su respuesta: los padres, a menudo, se preocupan demasiado rápido si escuchan llorar a su bebé.
Si bien es cierto que estas lágrimas dividen el corazón, el bebé debe llorar porque es su único medio de expresión. En promedio, un bebé llora 3 horas al día, y una hora desde las 6 semanas a los tres meses de vida. Pueden ser lágrimas de insatisfacción, angustia o tristeza. Es posible descifrar el llanto de un bebé en su etapa de desarrollo y, en general, los viejos métodos son los que lograrán el final de su llanto: cantarle, abrazarle…
Pero, también, el llanto excesivo puede estar relacionado con problemas de los padres: depresión o psicosis. En este caso, asegúrate de estar muy atento y cambia tu comportamiento delante del bebé. El objetivo: evitar las emociones negativas.
El bebé llora cuando no está en mis brazos, ¿qué hacer?
A través de sus lágrimas, tu pequeño te solicita. Él se ve solo en la cuna, en su habitación, y puede preocuparse. Pero, no son necesariamente tus brazos lo que reclama. Tu voz puede tranquilizarle.
Tu bebé puede aprender que la presencia no está fundamentalmente vinculada a la visión. Que aunque estés en la cocina o el comedor, estás cerca.
Habla con él, tu voz le tranquilizará. Es probable que puedas establecer, de forma remota, un diálogo con tu bebé con el que aprenderá a calmarse y notará tu presencia.
El bebé llora al ponerle en la silla de paseo, ¿qué hacer?
A los niños, por lo general, les encanta el movimiento asociado la silla de paseo o a la del auto. Él tiene que ver el mundo. Si llora en su cochecito asegúrate de que no tenga frío, no esté demasiado apretado o le moleste la ropa.
Sin embargo, algunos niños no pueden soportar que se les sujete con la correa de la sillita. Estas lágrimas pasarán tan pronto como se acostumbre.
El llanto de un bebé es normal en el primer trimestre
Un estudio realizado en 2006 por investigadores de la Universidad de British Columbia (Canadá), reveló que el llanto inconsolable del bebé en el primer trimestre de su vida forma parte de su desarrollo.
Llanto incesante, inconsolable e impredecible a los 2 meses del bebé
Un estudio canadiense realizado en 2006 revela que esta fase es común en todos los bebés y forma parte de su normal desarrollo.
Un pico mayor de llanto alrededor de los 2 meses
La investigación se basa en cincuenta estudios realizados entre 1962 y 2006, donde se ha analizado el comportamiento de un centenar de bebés durante sus primeros cinco meses de vida. Resultado: todos los niños, sin excepción, experimentan un pico mayor de llanto alrededor de los 2 meses.
Por lo tanto, el llanto durante este período no significa necesariamente que el niño esté enfermo o tenga cualquier problema. Estos episodios de llanto pueden durar entre 35 y 40 minutos, o de una o dos horas.
Son más intensos que a cualquier edad y se resisten a los intentos de apaciguamiento, concentrándose en la tarde y la noche. Aunque el llanto parece ir acompañado de muecas de dolor, los análisis muestran que no sufre.
Puede ser sólo un capricho pasajero: el llanto de estos bebés disminuirá y se estabilizará en torno a la edad de 4 o 5 meses. Los expertos lo llamaron “lloros púrpura”.
Una fase de desarrollo del bebé
Para entender las razones de estos «lloros púrpura», Ronald G. Barr y su equipo se preguntaron si la educación jugaba un papel. Así que hicieron una comparación con el pueblo Kung San, donde las mujeres están en contacto constante con sus bebés, les dan lactancia materna y responden a cualquiera de sus gemidos.
Este fenómeno también se encuentra en varias especies de mamíferos, tales como los chimpancés, macacos rhesus, los conejillos de indias o ratas. Por lo tanto, estas crisis no son exclusivas de los seres humanos.
En los bebés que nacen antes de tiempo, el fenómeno ocurre, generalmente, 6 semanas más tarde que en otros bebés.
La información demuestra que este fenómeno no se debe a la experiencia post-natal, sino al desarrollo del bebé.
Prevenir el síndrome del bebé sacudido
Las razones de estas lágrimas aún no se conocen, pero la teoría es la del instinto de supervivencia del niño. Tradicionalmente, los tres primeros meses son los más peligrosos para su supervivencia y son muchos los cambios en el bebé: es el momento en que comienza a fijarse en lo que tiene a su alrededor y cuando su necesidad de calorías aumenta.
Este estudio tiene como objetivo principal tranquilizar a los padres y prevenirles contra el síndrome del bebé sacudido. De hecho, el llanto constante, intenso, inconsolable, si se concentra en la noche, cuando mamá y papá están cansados, puede ser muy irritante y frustrante.
La pareja puede sentirse impotente y preguntarse qué está haciendo mal para no conseguir calmar a su niño. Debe saber que no es su culpa.
Ronald G. Barr aconseja ponerse en contacto con el bebé tomándole en brazos para tratar de apaciguarle.
Pero, si eso no funciona y te sientes frustrado e irritable, vuelve a acostar al bebé boca arriba y déjale llorar. El experto sugiere que le dejes solo mientras te calmas, y vuelvas a los pocos minutos.
Es importante no ceder a la agresión y al impulso de sacudir al niño.
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