Después del nacimiento de un bebé, una de las recomendaciones brindadas por los especialistas es que los padres le expongan a pequeños baños de sol desde casa. Ahora es cuando muchos padres se preguntan: ¿Para qué? ¿Por qué? ¿Son realmente necesarios los baños de sol? A continuación aclararemos todas las dudas sobre ese tema.
Que surjan estos interrogantes es normal porque muchas personas no conocen los beneficios y la importancia de realizar estos baños de sol a los bebés. Por esto, lo primero que debemos saber es que si exponemos al bebé al sol, su organismo podrá producir vitamina D con mayor facilidad (la vitamina D es necesaria para equilibrar los niveles de fósforo y calcio que circulan por la sangre).
Además, estos baños de sol son de gran ayuda para que los pequeños huesos de los bebés puedan absorber el calcio, aumentar la densidad ósea, disminuir los riesgos de fractura y fomentar la correcta formación de los dientes que aún no salen. Y por si fuera poco, el sol también permite que el bebé coordine su reloj biológico de manera natural creándole el hábito del sueño y reduciendo la ictericia neonatal.
¿Qué pasa si no le doy baños de sol a mi bebé?
Ahora puede que te preguntes: ¿Qué sucede si no se realizan los baños de sol? No realizar los baños de sol podría afectar en gran manera al organismo del bebé y producirle una falta notable de vitaminas que a su vez le generarían huesos más blandos y quebradizos.
¿Cómo realizar los baños de sol en recién nacidos?
Son muchos los padres que sienten temor cuando van a realizar los baños de sol a su bebé, bien sea por miedo a lastimarle o por tener que despertarle a horas tempranas. Pero, no hay de qué preocuparse ya que existen métodos sencillos para realizar los baños de sol de una forma completamente segura.
- Hay que colocar al bebé preferiblemente sin ropa pero siempre con el pañal para evitar irritaciones en las zonas genitales. En el caso de los ojos, se le puede colocar un antifaz para protegerle del sol o, mejor aún, evitar esa zona.
- Si el clima no permite sacar al bebé de casa, se puede optar por colocarle sobre una manta cerca de la ventana por la que entra el sol.
- La hora más recomendable para el baño de sol es antes de las 9 de la mañana, y si es por la tarde se hará después de las 4.
De acuerdo a la edad de tu bebé, utiliza protectores solares y procura que el tiempo que se encuentre expuesto al sol sea corto.
- El tiempo del baño debe ser un máximo de 10 minutos para cada lado del cuerpo, tanto de frente como de espalda; en caso de tratarse de un bebé de 6 meses o menos.
Durante todo este proceso también es importante el acompañamiento, pues no es recomendable dejar solo al infante mientras se realiza el baño de sol, pues esto ayudará a realizarles el baño de sol con mayor felicidad, ya que podrá acariciarlo o jugar mientras transcurre el tiempo.
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